La nutrición es parte integral de la vida de la gente, con lo que es esencial amoldarla a las pretensiones de todos.
En el momento en que llega el calor, comienzan a meditar poco a poco más en lo que comen y en de qué manera prosperar su nutrición para enfrentar este tiempo. Lo destacado es tener buenos hábitos, ¡siempre y en todo momento! No solo en la temporada de verano, así se impide toda clase de intentos errados de bajar de peso en 20 días o pasar por dietas muy restrictivas y de tendencia que no asistirán a sostener un peso conveniente en todo el tiempo.
Bebidas picantes y calientes
Semeja contradictorio, pero este es un viejo truco utilizado por varias personas que tienen mucho más experiencia en el calor (piense en India o México). El picante, por efecto de la capsaicina, puede contribuir a regular la temperatura corporal, merced a lo que se llama sudoración gustativa. Su primordial efecto es que la temperatura va a subir tras comer y esto va a hacer que sudemos mucho más.
El efecto es el opuesto a en el momento en que comes helado, que te refresca enseguida, pero por sus calorías y grasas y el golpe de frío, la sensación térmica próximamente regresa a acrecentar.
¿Qué alimentos se aconseja eludir comer? su contenido elevado en sodio, grasas y nitratos. Es conveniente comerlos en pequeñas proporciones y seleccionar los mucho más finos, por poner un ejemplo jamón natural, jamón de pavo, lomo o matambre.
Alimentos ricos en azúcar: a lo largo del verano tiende a ser muy interesante proceder a las heladerías con mucho más continuidad de lo común. El helado es un alimento que debe consumirse con moderación, puesto que tiene dentro enormes proporciones de azúcar, colorantes y conservantes.
Alcohol y refrescos: los dos aportan calorías vacías: en la situacion de los refrescos, el exceso de azúcar provoca que no te quiten la sed y termines tomando poco a poco más. Es conveniente reemplazarlos por jugos de frutas o bebidas sin azúcar y, naturalmente, agua.
Alimentos ultraprocesados: este género de alimentos se acostumbra emplear en el momento en que no hay tiempo ni ganas de cocinar. Los muslos de pollo, las hamburguesas, las salchichas, la pizza o los snacks se vuelven muy deseables y simples de elaborar. Estos alimentos poseen enormes proporciones de sodio, conservantes y grasas que son dañinos para la salud y no asisten en nada a sostener el peso.
Los artículos de bollería como los tradicionales billetes, churros, cuadros de grasa o tortas son alimentos con grasas añadidas, azúcar y harinas refinadas que aportan solo un sinnúmero de calorías y pocos nutrientes. Supervisar la proporción de estos alimentos va a ser clave para sostener el peso.
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